Un niño en Tulum mira pasar el Tren Maya con los ojos brillantes. No es solo un tren: es la promesa de conocer lugares que antes parecían lejanos y la posibilidad de que su comunidad reciba visitantes del mundo entero. El rugido metálico que cruza la selva es también un eco de esperanza.
De sueño regional a red nacional
Inaugurado en diciembre de 2023, el Tren Maya inició como un proyecto para detonar el sureste. Hoy, bajo la gestión de la presidenta Claudia Sheinbaum, se expande hacia el centro y norte del país, alcanzando ciudades como Pachuca, Nuevo Laredo y Nogales. La meta: más de 3,000 km de nuevas vías férreas que transformen la movilidad de México.
Conectividad y turismo sin precedentes
- Expansión nacional: de Yucatán a la frontera norte.
- Presencia internacional en ferias como la de Londres.
- Embajadores y turistas ven al Tren Maya como un nuevo imán de inversión.
Bienestar sobre rieles
La inclusión también viaja a bordo. Ahora, la Tarjeta del Bienestar es aceptada para comprar boletos, facilitando el acceso a millones de personas. Cada viaje se convierte en una experiencia digna, accesible y transformadora.
Estaciones que cuentan historias
Más que puntos de llegada, las estaciones son portales culturales: Cobá, Tulum, Xel-Há y Chacmultún abren rutas arqueológicas que reconectan a México con su pasado y lo proyectan hacia el mundo. El Tren Maya no solo une ciudades: une civilizaciones.
México en movimiento
El segundo piso de la Cuarta Transformación se construye sobre rieles. Millones de empleos, turistas y esperanzas viajan en este coloso ferroviario que se convierte en identidad nacional. La pregunta es: ¿estamos listos para asumir el cambio profundo que implica?
El Tren Maya es más que infraestructura: es narrativa, orgullo y transformación. ¿Qué significa para ti este viaje hacia el futuro?
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